"Creo que el jazz es una música que tiene que estar al servicio de las emociones", dice Giulia Valle. Y todos coinciden en que así sucede con la música que hace con su Trío, la formación con la que se presenta en el circuito Barcelona Districte Cultural. "Quizás hay quién piensa que el jazz es una música demasiada intelectual, pero es porque no ha tenido suerte con la que escuchado. Tenemos que pensar que se ha hecho jazz a lo largo del último siglo y que hay muchas maneras de hacerlo, que hay muchas influencias", añade Giulia Valle, que ahora presenta las composiciones de Live in San Francisco, porque es la ciudad estadounidense donde ha grabado su último trabajo discográfico. "He tenido la suerte de que me han llamado para actuar allá muchas veces. Con mi quinteto, con mi trío, con un trío americano...Así que ya hemos establecido un vínculo importante", añade.
Y ¿cómo es la música que hace Giulia Valle, unas partituras que están consiguiendo atrapar no sólo a las audiencias de aquí sino también a las del otro lado del Atlántico? "Es una música que atrapa, que expresa emociones.. Una música rítmicamente muy potente, con muchos contrastes. Es un viaje, un viaje que está muy bien ejecutado, muy bien defendido por mis músicos", añade la compositora que sólo tiene halagos para defender el trabajo del pianista Marco Mezquida y el batería David Xirgu. "Las nuevas composiciones, las que presentamos en Live in San Francisco suponen un punto de madurez", explica también la compositora y contrabajista.
Asegura Giulia Valle que el nivel de los músicos de jazz que trabajan Barcelona "es muy alto. Ha habido en los últimos años una explosión; hay en la ciudad muchos grupos conocidos pero también otros que todavia no lo son. Esta es una ciudad donde han nacido muchos proyectos de autor". Y si defiende el nivel de los intérpretes, hace lo mismo con el público que hay para el género en la ciudad: "Siempre ha habido muy buen público para el jazz", defiende aunque advierte de que "la crisis ha hecho mucho mal y mucha gente busca ahora el confort de músicas muy fáciles de digerir y esto ha afectado también en muchos programadores".