Un bergantín...

Esto decía el famoso poeta Espronceda en el siglo XIX, recordando las épocas en que los grandes barcos a vela dominaban el mar surcando las olas embravecidas.

 

Nos hablaba de un bergantín, un tipo de velero generalmente formado por dos postes y con velas cuadradas. Se caracterizaba por su capacidad de almacenamiento, y también por su rápida velocidad. Por todo ello se usaba para transportes a larga distancia, entre continentes. Pero también, por el mismo motivo, ¡se convirtieron en barcos piratas!

 

Ahora, en el Museo Marítimo, podéis construir un bergantín a escala, y reaprovechando materiales, con sólo una botella vacía de agua, unos palos y pequeñas velas.

 

Si lo dejáis en el mar tal vez un día avistará las costas de América ... "¡tierra a la vistaaaaa!".