Solo para niños y niñas curiosos

La luz y el color, el aire y el viento... los niños y niñas más curiosos descubren muchos fenómenos y realidades físicas mientras viven la aventura apasionante del conocimiento. Si tienes o conoces a niños o niñas con curiosidad, debes saber que en CosmoCaixa acaban de crear un espacio especialmente pensado para estimularles los deseos de aprender cosas nuevas. Desde el 23 de marzo, sé bienvenido o bienvenida al Clik.

Es el nuevo espacio que han imaginado en CosmoCaixa, un entorno pedagógico que, en una experiencia tan provechosa como divertida, enseña a los pequeños qué significa explorar y experimentar y les pone en contacto con la consecuencia más directa de ambas cosas: hacer descubrimientos.

Hay que comprar una entrada (6 €), además de la entrada a CosmoCaixa, para disfrutar de la experiencia, que no tiene una duración máxima ni mínima (depende del usuario) pero que durante aproximadamente una hora y media te conducirá por espacios diversos.

Uno de los espacios de Clik, por ejemplo, invita los niños y niñas a preguntarse por la naturaleza del aire y a experimentar con la fuerza y la dirección del viento. Algo tan sencillo como un avión de papel permitirá a los jóvenes visitantes aprender muchas cosas al ver las diferencias en el vuelo que se producen si cambian la forma del juguete. Muy cerca, una gran mesa de aire permite hacer volar elementos de formas, medidas y pesos diferentes.

La luz y el color son otros aspectos del mundo físico que los niños y niñas pueden explorar, estudiando los fenómenos de la refracción y la reflexión o comprobando (o quizás descubriendo) de qué manera se crean los colores. Mesas de luz y elementos de formas y colores diversos ayudarán a los pequeños científicos en sus investigaciones.

Un espacio dedicado al agua, donde los niños aprenderán conceptos como el de tensión superficial, o un apartado dedicado a la construcción de estructuras y puentes son otros aspectos de un espacio que no solo intenta proporcionar a los niños y niñas una experiencia de una tarde o una mañana, sino imbuir en sus cerebros los conceptos de la experimentación y el aprendizaje, para que continúen aplicándolos cuando salgan del museo.

Si conoces a un niño o una niña de entre 3 y 11 años con mucha curiosidad, hazle un favor y llévalo al nuevo Clik de CosmoCaixa. Quizás contrubuyas así al éxito de una futura carrera científica.