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Imagen de uno de los paisajes abstractos creados por la artista

'Piel' o el territorio fronterizo entre el mundo analógico y el digital, en ImaginCafé

El mundo digital se impone a cada momento que pasa en todos los campos de nuestra vida, incluyendo la creación, pero aún convive con el universo analógico. ¿Cómo? Lo explora una artista que expone del 3 al 20 de septiembre en el ImaginCafé.

Nos referimos a Ana Drucker, una artista nacida en México pero instalada en Barcelona que, como cuenta ella misma, centra su trabajo artístico en la experimentación visual. Interesada especialmente en texturas y colores, se siente especialmente cómoda en el territorio fronterizo entre la creación analógica y la digital.

Lo veréis si visitáis estos días el ImaginCafé y os detenéis ante las obras que forman la muestra Piel, una selección de imágenes especialmente sugerentes que, aún así, no parecen tener un origen claro. Y es que son unas composiciones extrañas y oníricas que parecen fotografías, pero también dibujos o productos de una creación digital.

Son, de hecho, las tres cosas, puesto que la artista combina estas técnicas para crear unos paisajes abstractos donde lo más importante son los colores y unas texturas que casi parece que se puedan tocar. 

La exposición es una buena manera de explorar las posibilidades de combinar dos universos aparentemente opuestos en el mundo de la creación plástica y de conocer las obras de una artista que, además, también es responsable de la programación visual del Mira Festival, dedicado a las artes digitales.

Si queréis saber más sobre Ana Drucker y las obras que forman la exposición Piel, visitad la web del ImaginCafé.

 

Fecha de publicación: Lunes, 10 Septiembre 2018
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