Nace el Museo del Diseño de Barcelona

El nuevo equipamiento ocupa una parte del edificio Disseny Hub Barcelona junto con la sede del FAD, el BDC (Barcelona Centre de Disseny) y la Biblioteca El Clot-Josep Benet, y quiere contribuir a hacer crecer la plaza de les Glòries como uno de los centros neurálgicos de la ciudad, atendiendo a uno de los planteamientos que hizo Ildefons Cerdà.

El Museo del Diseño de Barcelona como proyecto hace años que está en marcha, pero la tarea no acaba con la inauguración ya que se plantea como un programa vivo que irá creciendo y evolucionando en los próximos años.

Según Pilar Vélez, directora del Museo, el nuevo equipamiento contará con 70.000 piezas que integraban cuatro grandes colecciones, las unifica y les da un entorno óptimo para estar expuestas. Se podrá disfrutar de muestras tan valiosas como la del Vidrio Catalán del SXVI, la de Vestidos Medievales, de gran reconocimiento internacional o las donaciones de Miró o Picasso que integran la colección de Artes de Autor.

Aunque, de las 70.000 piezas que conformarán el museo, no todas estarán expuestas porque se mantendrán como aparte de las reservas compactadas, sí que se podrán ir viendo gracias a la creación de una galería en línea. Posiblemente, a finales del 2014 las colecciones abiertas y algunas piezas de la reserva ya podrán consultarse pero la tarea se irá haciendo poco a poco hasta completar todas las piezas.

Las exposiciones hacen un recorrido por las artes decorativas, desde las históricas hasta las artes contemporáneas y de autor propias del panorama más actual y vinculadas a la experimentación y las investigaciones plásticas. Así pues, las colecciones de cerámica, textil e indumentaria, artes gráficas y diseño encuentran una coherencia temporal gracias a ésta última que hace de bisagra entre el legado artístico histórico y el contemporáneo.

Según Pilar Vélez, es importante hablar y destacar el concepto "Estilo Barcelona" que surge como explicación a la realidad que ha vivido la ciudad a lo largo de los siglos y al mantenimiento de su patrimonio. En Barcelona la sociedad civil tiene un peso específico muy importante. Las colecciones de la ciudad no provienen de inversiones estatales o donaciones reales, como sucede en otras ciudades o países, sino que son fruto de un esfuerzo colectivo, de la necesidad de conservar y estudiar, de la suma de muchas vocaciones coleccionistas. Es por este motivo que en estas colecciones se encuentran piezas provenientes de orígenes muy diversos, familias, ciudadanos o entidades que se han preocupado por preservarlo.

Por lo tanto, los objetivos del trabajo del Museo del Diseño de Barcelona son como tiene que ser el diseño, o que pide el público a los artistas y diseñadores y mantener Barcelona como ciudad referente y puntera en esta disciplina a través suyo, de sus colecciones y actividades complementarias que se irán haciendo.

En definitiva, el museo trabaja dos líneas muy claras. Por una parte, la no temporalidad intentando no hacer distinción entre pasado, presente y futuro gracias a las colecciones y, de otra, la capacidad de generar creatividad y experimentación a través de propuestas y actividades complementarias en las colecciones.