¿Pensáis que 30 elefantes se pueden esconder bajo un paraguas? Nosotros os damos la respuesta: Sí. Y no sólo pueden guarecerse los elefantes, los grandes y los pequeños y sus trompas gigantescas, sino que también caben unos cuántos niños y sus padres; niños pequeños, incluso algún bebé, que acompañan a los elefantes de La Petita Malumaluga, que comparten con ellos, que sueñan con ellos, que contemplan con ellos un mundo que todavía tienen que descubrir como los marineros del cuento que narra una voz en off: unos marineros que llegan a un delta, el delta donde viven los elefantes y una vez ya en tierra se adentran en la aventura.

No os descubriremos las sorpresas que se esconden bajo el paraguas que ha fabricado La Petita Malumaluga y que la bailarina y coreógrafa Eva Vilamitjana hace danzar sobre el escenario. Sólo os diremos que La Petita Malumaluga construye un mundo de magia y de poesía, un mundo donde todos encontraremos un cobijo desde el cual compartir y bajo el cual podremos jugar.

Paraguas, elefantes, cajas, telas, lluvia, luces, marineros.... Un barco pequeño. Unas cuantas semanas en el mar. El descubrimiento de una tierra inabarcable por cualquier brújula: el delta de los 30 elefantes bajo un paraguas. Son.30 elefantes, guarecidos de mentiras bajo un paraguas donde todos vosotros también encontraréis refugio, como lo han encontrado todos los que se han acercado a una de las dos sesiones que la compañía ha ofrecido en el Centre Cívic La Sadeta.