Drama nuclear en La Seca Espai Brossa

Los que tengáis una cierta edad recordaréis el accidente nuclear de Chernobyl, en la antigua URSS y hoy población del Estado de Ucrania. La catástrofe ocurrió el sábado 26 de abril de 1986, y todavía ahora está considerada la más grave de tipo nuclear que jamás ha habido. Provocó la evacuación de cientos de miles de habitantes en un radio de 30 km de la central, y, aunque hay estudios divergentes sobre mortalidad y enfermedades a corto y medio plazo como consecuencia del accidente, lo que está claro es que las personas afectadas en menor o mayor grado por la radiación hay que contarlas a miles, con el cáncer de tiroides como enfermedad grave más frecuente. La Seca Espai Brossa y la compañía Potcuia nos refrescan este septiembre la memoria de aquella tragedia, y especialmente dan voz a sus víctimas, unas personas afectadas que, como ocurre con prácticamente todas las desgracias, primero se las escuchó, pero al cabo de muy poco tiempo cayeron en el olvido. El montaje lleva por nombre Veus de Txernòbil, y se representará entre el 5 y el 30 de septiembre.

Según explican sus creadores, la idea de hacer esta obra surgió después de leer el libro Oración de Chernobyl, de Svetlena Aleksiévitx, y de ver el documental Las abuelas de Chernobyl. Joan Cusó es el director del espectáculo, pero la dramaturgia ha recaído en toda la compañía, ya que, según se puede leer en la sinopsis, "sin referencias escénicas del tema, el trabajo de creación nos ha obligado desde su inicio a una implicación absoluta por parte de todos los que hemos participado en el viaje dialéctico y vital, no sólo para buscar un código de interpretación, sino también en la construcción de los materiales plásticos que hemos generado desde el imaginario compartido". Sus intérpretes son Adrià Girona, Andrea Pellejero, Momó Fabré, Reetta Moilanen y Rut Girona.

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