“Una ciudad, un film” en la Filmoteca

Imágenes de ciudades como Barcelona, Nueva York, París, Tokio, Lisboa o Londres forman parte de la iconografía popular de la historia del cine. Así, bajo el título Una ciudad, un film, la Filmoteca de Catalunya ofrece este mes de agosto un ciclo donde estas y otras metrópolis centran los argumentos de algunos de los films de cineastas tan reputados como Billy Wilder, Blake Edwards, Yasujirô Ozu o Alain Tanner.

 

Algunos de ellos conocen bien las calles de las ciudades donde han filmado sus historias. Es el caso, por ejemplo, del japonés Yasujirô Ozu con la obra maestra Cuentos de Tokio; y del sueco Ingmar Bergman con el Estocolmo retratado en Un verano con Mónica.

 

Otros cineastas decidieron asumir el rol de turista accidental en ciudades que no eran las suyas. Así, el norteamericano Jules Dassin filmó en Londres el thriller La nit i la ciutat en el año 1950, huyendo del maccarthismo; Billy Wilder trató la guerra fría con sarcasmo e ironía desde Berlín con Uno, dos, tres; y el suizo Alain Tanner se fijó en Lisboa en En la ciudad blanca.

 

Escondidos en Brujas (Brujas, Martin McDonagh), La virgen de los sicarios (Medellín, Barbet Schroeder) y Mai en diumenge (El Pireo, Jules Dassin) son los otros films que se proyectarán en un ciclo donde ya se han podido ver El vientre de un arquitecto (Roma, Peter Greenaway), En la ciudad (Barcelona, Cesc Gay), Cita al juliol (París, Jacques Becker) y la icónica Desayuno con diamantes (Nueva York, Blake Edwards).