Sónar: nueva inmersión en el presente de los sonidos electrónicos

El festival Sónar ya no necesita presentación. Durante 24 ediciones ha sido un referente mundial de las músicas tecnológicas, de las conexiones entre máquinas y sentimientos, un espacio de descubrimiento de nuevos lenguajes a partir de ritmos de baile, texturas futuristas y estructuras innovadoras. Ir al Sónar es entrar en una dimensión paralela donde el presente musical se manifiesta en su versión más refrescante y divertida, y donde se anticipa el futuro. También hay viajes al pasado y toda una dimensión expositiva, un congreso sobre tecnología e ideas simultáneo –el Sónar +D, que es una especie de festival dentro del festival– y, en definitiva, tres días de actividades, DJs y conciertos donde hierven las ideas.

Este año, Sónar viene muy fuerte, y no tanto por la presencia de grandes estrellas –hace tiempo que estas figuras no suelen aparecer en la programación, Sónar tiene una voluntad underground–, sino por la riqueza de ángulos sonoros que podemos encontrar en la parrilla. Tendremos la presencia de Björk como DJ en una jornada inaugural el miércoles 14 (con las entradas ya agotadas), y entre el jueves y el sábado una serie de artistas que están renovando lenguajes como el soul y el funk (Anderson .Paak, Thundercat), el house (The Black Madonna, Nina Kraviz), la electrónica abstracta (Arca, Evian Christ) y nuevos lenguajes de la calle como el trap (Bad Gyal), el grime (GAIKA) o el footwork (Jlin). Son más de 150 artistas, en un entorno lúdico y avanzado, donde la constante será la sorpresa. Todo en las dos sedes habituales de Sónar: Fira Montjuïc para las actividades de día, y Fira Gran Vía 2 en L'Hospitalet para las de noche.

Encontrarás más información sobre horarios, programación, actividades paralelas y entradas disponibles en la web de Sónar.