Quantum: física de partículas y danza, en el mercat de les flors

De la experiencia de la residencia surgió una oda a la física de las partículas para seis bailarines con música original de la estadounidense Carla Scaletta que incorpora datos reales del acelerador de partículas.

En el CERN, Gilles Jobin descubrió que sólo somos polvo de estrellas flotando en el espacio y que la gravedad es la fuerza más débil del universo -una auténtica sorpresa para un bailarín contemporáneo cuya obra se centra a menudo en el contacto con la tierra-, y pudo conocer una figura emergente de las artes visuales, el artista alemán Julius von Bismarck. El resultado de esta colisión artística fue Quantum, una pieza de gran sofisticación.

Las radicales direcciones artísticas y el reconocimiento internacional convirtió a Gilles Jobin en precursor de una nueva generación de coreógrafos europeos, a partir del estreno de Braindance, que inauguró la temporada 2000-2001 en el Théâtre de la Ville de París. El 2006 se convirtió en artista asociado de Bonlieu Scène nationale Annecy (Francia), donde estrenó cuatro producciones. En el 2012 Jobin fue galardonado con el primer premio de danza y espectáculo COLLIDE@CERN-Geneva por su propuesta de explorar, a través de la danza y otras intervenciones, la relación entre la mente y el cuerpo en el laboratorio de física de partículas más grande del mundo. En el 2013, por encargo de la Cie Virevolte, creóProtokids y produjo Quantum en el marco del CERN CMS Experiment.

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