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Los mercados de Barcelona, reflejo de la ciudad

Un recorrido por algunos de los recintos más emblemáticos y de más interés histórico, arquitectónico y cultural

Barcelona es una de las pocas ciudades del mundo con una red suficientemente amplia de mercados para que cada barrio tenga uno cerca, hasta llegar a los 43 que hay actualmente.

El primer mercado del que se tiene constancia data del siglo X y estaba situado sobre el emplazamiento de la actual plaza de l'Àngel. A medida que la ciudad extendía sus límites también crecían los mercados, hasta llegar al nuevo modelo de recinto cubierto del siglo XIX. Ya en el siglo XX la expansión de los mercados continuó y actualmente se está en una nueva fase de modernización. 

Una pequeña muestra por los mercados emblemáticos de la ciudad  podría ser la que os proponemos, y empezar, por ejemplo, en la parte alta. El mercado de Sarrià tiene mucha presencia ya que conserva la estructura original y la fachada de obra vista de clara inspiración modernista de principios de siglo XX. Entonces, Sarrià todavía era un municipio independiente. Dentro del mismo distrito, pero más abajo, podemos detenernos en el mercado de Galvany, impactante por sus dimensiones y sus vidrieras, también modernista, como el mercado de Sants diseñado por el arquitecto Falqués i Urpí. No en vano está catalogado como monumento artístico. Toma el nombre del barón de Galvany, propietario de los terrenos cedidos para su construcción, iniciada en 1868. 

Si hacemos camino hacia Gràcia, podemos visitar no uno, sino dos mercados con solera. Por un lado está el de la Llibertat, remodelado íntegramente en 2009 respetando el valor patrimonial del edificio y con el escudo del barrio de hierro forjado en cada una de las dos fachadas principales, obra de Francesc Berenguer i Mestres. El de la Llibertat fue símbolo de la sublevación de Gràcia, cuando aún era pueblo vecino de Barcelona. También dentro del barrio está el de l'Abaceria Central, que mantiene el espíritu de la Gràcia más popular y fue inaugurado en 1892 bajo el nombre de mercado de Santa Isabel, fruto de la ordenación necesaria de los campesinos que venían a la vecina plaza de la Revolución. 

Ya en Ciutat Vella, el de Santa Caterina es un nuevo icono de la ciudad, gracias sobre todo a su nueva y vistosa cubierta fruto de la remodelación a cargo de Enric Miralles. El mercado se construyó sobre el emplazamiento de un antiguo convento, por lo que adoptó el nombre de la santa al que iba dedicado, tal como fue tradición en muchos otros espacios. Santa Caterina, además, es el primer mercado cubierto de la ciudad, uniendo la estructura metálica con el vidrio. Actualmente incluye el espacio MUHBA Santa Caterina donde son visibles parte de los vestigios del antiguo convento. 

Al otro lado de las Ramblas, poco queda por decir de la Boqueria, mercado de fama internacional que pasó por el mismo proceso de modernización que otros como el de Poblenou, el de Lesseps, el de la Concepció o el de la Barceloneta. En el Eixample también se está remodelando el mercado del Ninot, que toma su nombre a la pasión por un mascarón de proa de la hija de un tabernero. El original del mascarón se conserva ahora en el Museu Marítim, pero en el Ninot se puede ver una reproducción. 

De antiguos mercados nuevos y emblemáticos espacios, hay dos ejemplos recientes: por un lado el mercado del Born, reconvertido ahora en el flamante nuevo centro cultural, que fue el primer mercado modernista. Por otro, los nuevos Encants Vells - Feria de Bellcaire, atalaya moderna de la plaza de las Glòries. 

Finalmente podemos terminar la ruta en el mercado de Sant Antoni, que está en plena remodelación y actualmente poco se puede visitar. En los próximos tiempos, sin embargo, la recompensa será grande: a principios de este pasado verano se hizo público que un equipo de arqueólogos ha hecho hallazgos en su subsuelo que abarcan restos de la época romana, del sistema defensivo de la ciudad en el siglo XVII y de la época moderna. El recinto de Sant Antoni, sin embargo, también es conocido por su mercado dominical donde se pueden encontrar revistas, libros, cromos o videojuegos, en la que es la feria de este tipo más grande del mundo. 

Una prueba más de que pocas cosas hay más arraigadas en la cultura de una ciudad que sus mercados.

Fecha de publicación: Viernes, 26 Septiembre 2014
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