La fotografía maliciosa de Alberto García-Alix se expone en la Virreina

Amante de la moto porque le da libertad y del objetivo porque puede explotar su vertiente más maliciosa Alberto García-Alix nos acerca a la comprensión de una parte clave de su obra: aquélla que trata directamente sobre él mismo.

Aunque las fotografías siguen el hilo de la vida del autor, esta muestra no pretende acercarnos al diario del artista ni presenta una documentación cronológica de su vida o un ejercicio egocéntrico. Su intención siempre es generar una nueva realidad donde el espectador también tiene un lugar. La forma en que García-Alix se mira a través de la fotografía evoluciona a lo largo de los años adoptando diferentes variantes y dejando una huella que ahora se recompone con esta exposición.

Para el artista, el concepto de autorretrato es muy amplio, ya que abraza una gran parte de su obra en que se considera reflejado. En el trabajo de este autor es difícil encontrar una pieza que no sea intensamente auto-referencial, incluso podríamos decir que toda su obra, en conjunto, forma un gran autorretrato.

El esfuerzo de mirarse, de encontrarse consigo mismo mediante el ejercicio fotográfico, se convierte en una constante en su trabajo y va abriendo camino a nuevas búsquedas, a nuevos encuadres.

Nacido el 22 de marzo de 1956 en León, empezó su carrera como fotógrafo desde bien joven. Sus primeros negativos fechan del año 1976. Al principio de los años 80 realiza sus primeras exposiciones individuales a galerías de Madrid como la Galería Buades o la Galería Moriarty, así como a galerías internacionales como la Portfolio Gallery de Londres. En 1986, pasa al formato medio y empieza a realizar trabajos por encargo para diseñadores de moda, además de trabajos editoriales para El País o Vogue.

Entre 2003 y 2006 traslada su domicilio a París, donde realiza una trilogía en vídeo alternante imagen fotográfica y filmada, que representa la incursión del artista en el formato vídeo, y que continúa en la actualidad en paralelo a su tarea de fotógrafo que ha cuidado hasta la actualidad.

Su obra se encuentra en grandes colecciones internacionales como la del MNCARS, los Fonds Nationales d'Art Contemporain de Francia, o la colección de la Deutsche Börse en Alemania.