El MNAC explora la relación de Picasso con el arte románico

Artista genial y poliédrico, Pablo Picasso absorbió decenas de influencias en su estilo único. Algunas son más conocidas, como el arte negro africano. Otras no tanto. Es el caso del impacto de los maestros del arte románico catalán, los llamados primitivos catalanes. Para indagar sobre este vínculo, el MNAC - Museu Nacional d’Art de Catalunya presenta, a partir del jueves 17 de noviembre, la exposición Picasso románico.

La muestra, coorganizada con el Musée Picasso de París, incorpora 20 obras del pintor procedentes del museo de la capital francesa y las instala en las salas de la colección permanente del MNAC, lado a lado con pinturas y tallas románicas. De la comparación, aparecen claras algunas afinidades, como el tratamiento recurrente por parte de Picasso de temas como la crucifixión o figuras como la virgen y las calaveras.

Para explicar esta influencia, la exposición, comisariada por Juan José Lahuerta y Emilia Philippot, detalla dos momentos claves. Por una parte, la estancia de dos meses y medio, la primavera de 1906, de Pablo Picasso y su compañera Fernande Olivier, en el pueblo pirenaico de Gósol. Allí, el pintor quedó impresionado por el arte románico, y en concreto por la Virgen de Gósol, talla del siglo XII que estaba en la iglesia de Santa María del castillo de la población bergadana, y que actualmente se conserva en el MNAC. El otro acontecimiento capital fue la visita que Picasso realizó en 1934, cuando ya era una figura internacional y con gran eco en la prensa, a las colecciones de arte románico del Museu d’Art de Catalunya, poco antes que fuera inaugurado, en noviembre de ese año, en la sede del Palacio Nacional de Montjuïc, donde todavía continúa hoy en día y que ahora cierra el círculo con la muestra Picasso románico.

Título: Picasso románico

Fechas: 17 de noviembre - 26 de febrero

Espacio: MNAC - Museu Nacional d’Art de Catalunya (Palacio Nacional. Parque de Montjuïc)

Precio: 12 €

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