El edificio Termes del Pati Llimona muestra las ruinas romanas
La instalación anexa al centro cívico contiene 17 metros de la antigua muralla romana de la ciudad, unas termas del siglo I y techos del siglo XIX
Las obras que hace tres años acabaron en el Pati Llimona dejaron al descubierto las ruinas romanas que escondía la instalación del edificio annexo en el centro cívico. Desde entonces, en el número 7 de la calle Regomir se puede ver un complejo arqueológico que constituye un espacio cultural de referencia en la ciudad, y un lugar imprescindible para entender la historia de Barcelona.
Entre mediados del siglo I y principios del II, fuera de Barcino, en los dos lados de la puerta de entrada por el lado mar se construyeron dos conjuntos termales portuarios, uno para hombres y otro para mujeres. Los restos que se conservan en la entrada del edificio Termes, anexo al Centre Cívic Pati Llimona, son las de la piscina de la sala fría. Se conservan en muy buen estado las escaleras que los usuarios usaban para acceder a ella.
A lo largo de la ampliación del espacio, que se llevaron a cabo entre el 2009 y el 2012, también hay diecisiete metros de la muralla de la ciudad romana y todo lo que queda de la puerta de mar, por donde entraban los mercaderes y las mercancías procedentes de todo el Mediterráneo.
La construcción del castellum marítimo en el siglo IV y las transformaciones de la nueva muralla en el siglo X afectó a las termas portuarias suburbanas. Los trabajos que hace unos años restauraron el edificio han dejado al descubierto el valioso complejo arqueológico, que se puede visitar gratuitamente.
Ruinas romanas del edificio Termes del Pati Llimona
Fechas y horas: de martes a viernes de 10 a 13h y de 17 a 20h
Espacio: Pati Llimona
Precio: entrada gratuita
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