'Conversation Pieces' o la lectura moderna del arte del pasado

Iker Spozio es un artista nacido en Italia pero que hace ya unos años que vive y trabaja en San Sebastián. Estudió Arqueología en Milán, pero enseguida se puso a trabajar como ilustrador, especialmente en el campo de la música, y, como parte de su evolución personal, finalmente se ha dedicado a la pintura.

Si habéis visto la imagen que acompaña estas líneas, ya os habréis dado cuenta que las suyas son composiciones no figurativas, de aspecto geométrico. Y, de hecho, han sido creadas siguiendo antiguas técnicas tradicionales.

Sus obras, que se han visto en ciudades como por ejemplo Seúl, Moscú, Tokyo, Londres, Bilbao o Roma, recrean ahora un género pictórico que era bastante habitual en  la Gran Bretaña del siglo XVIII, lo que se denominan Conversation Pieces.

Eran obras que mostraban a personas dialogando o interactuando, habitualmente en espacios interiores de carácter doméstico o bien en espacios naturales. Spozio aplica este mismo principio a sus pinturas no figurativas y combina así elementos geométricos que establecen un diálogo y se complementan.

El artista representa una síntesis de ideas, una combinación de conceptos, formas y colores que no es casual, sino que bebe tanto de las leyes sobre la división armónica de la superficie pictórica como de las enseñanzas de la escuela de la Gestalt y de teorías sobre el color y la óptica de científicos como Chevreul, Munsell o Ostwald.

Las creaciones de Iker Spozio quizás sean modernas, pero están elaboradas con técnicas antiguas que se remontan a los siglos XVI, XVII y XVIII. En las obras, el artista utiliza también elementos aún más antiguos, como la clara de huevo combinada con los pigmentos, una técnica propia de la tradición medieval y las obras religiosas bizantinas.

Si queréis saber más sobre la exposición de Iker Spozio en Miscelänea, consultad la web de este espacio de arte del Raval.