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Detalle de la casa Amatller, que se puede visitar cada día

Conoces la casa Amatller?

Cada día de la semana hay la posibilidad de visitar el interior del edificio reformado por Puig i Cadafalch

La casa Amatller se encuentra en pleno Paseo de Gracia, muy cerca de otras construcciones también muy emblemáticas de la ciudad. Se trata de un edificio que en su momento reformó de arriba abajo el arquitecto Josep Puig i Cadafalch, uno de los grandes nombres del modernismo, por encargo del industrial chocolatero Antoni Amatller. Hoy en día, y después de una restauración a fondo que finalizó en 2014, la casa está abierta al público todos los días de la semana, siempre en formato de visita guiada. Las limitaciones del espacio y la fragilidad de algunos objetos conlleva a que puedan entrar en cada sesión un máximo de 12 personas, y por lo tanto es muy recomendable reservar con antelación si os queréis asegurar la entrada. Está completamente prohibido llevar zapatos con tacones de aguja, y las mochilas, paraguas y otros objetos que pueden dañar la decoración o el mobiliario necesario hay que dejarlos en el guardarropa.

Hay visitas de dos tipos: las "normales", de una hora de duración, y que se hacen en catalán, castellano o inglés, y las exprés, de 30 minutos, y en el que el guía combina los tres idiomas mencionados. Evidentemente, el precio de la entrada para una u otra también es diferente. La fachada, la planta baja y el piso principal, que ocupa toda la planta, son los tres grandes espacios de la visita.

En 1898 Antoni Amatller compró una finca de 1.415 m2 con planta baja, cuatro pisos y un jardín de poco más de 800 m2. Estaba construida de 1875 con la dirección del maestro de obras Antoni Robert. El industrial encargó la remodelación del edificio, que había comprado para convertirlo en su residencia, a Puig y Cadafalch. El historiador, político y arquitecto de Mataró hizo una transformación radical, derribando y recomponiendo la fachada, construyendo un estudio fotográfico en la azotea, reestructurando la planta baja, redistribuyendo y redecorando el piso principal, incorporando un ascensor eléctrico, y rehabilitando cocinas y baños de todas las viviendas. El modernismo había entrado con toda su riqueza y variedad en la casa Amatller.

 

Fecha de publicación: Viernes, 02 Septiembre 2016
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